Córdoba acogerá en noviembre una nueva edición del evento que reúne a referentes del sector nupcial, con ponencias, talleres y reconocimientos internacionales
Del 18 al 20 de noviembre de 2025, la ciudad de Córdoba volverá a convertirse en epicentro de la fotografía y el vídeo nupcial con la celebración del Congreso Moguera. Organizado por la Asociación de Profesionales de la Imagen (APROIMA), este evento internacional reúne cada año a fotógrafos, videógrafos y empresas vinculadas al sector de las bodas, consolidándose como una plataforma clave para la formación, el intercambio de ideas y la innovación.
Tras el impulso de su edición inaugural, Moguera busca consolidarse como un encuentro de referencia para el sector audiovisual vinculado a las bodas. Para esta segunda edición, está prevista la entrega de una nueva edición de los Premios Azahar, que reconocen el talento y la creatividad en fotografía y vídeo nupcial.
«Es uno de los pocos eventos que combina la inspiración creativa con la actualización profesional», señalan desde Amor Fotografía, estudio especializado en reportajes de boda. En su opinión, este tipo de iniciativas son «imprescindibles para quienes desean ofrecer un trabajo cuidado, honesto y con personalidad propia, especialmente en un sector tan emocional y exigente como el de la fotografía para bodas«.
La programación incluirá conferencias, talleres, sesiones prácticas y una zona expositiva con marcas líderes como Canon, Fujifilm o Profoto. Además, se fomentará el networking entre profesionales, promoviendo colaboraciones y el fortalecimiento del tejido creativo a nivel nacional.
La edición de este año se celebrará en el emblemático edificio del Rectorado de Córdoba, entre los días 18 y 20 de noviembre. La organización ha habilitado un sistema de venta anticipada de entradas a través de su página web oficial, y se prevé una buena acogida tras el interés generado en la edición anterior.
En un mercado tan competitivo como el de la fotografía nupcial, espacios como el Congreso Moguera permiten renovar perspectivas, mejorar procesos y, sobre todo, seguir construyendo una profesión donde técnica y sensibilidad deben ir de la mano.